
Hemos pasado una semana en la casa pequeña y solo puedo decir cosas buenas de la estancia. Para empezar, la casa es fantástica. Más allá del jardín, la piscina y la zona de juegos para los niños, la tranquilidad de la zona y las vistas a la ría desde la terraza son para sentarse y no moverse de ahí en todo el día. Es la casa más limpia en la que hemos estado nunca y todo está en perfecto estado, algo poco habitual en los alquileres turísticos. La zona es preciosa y dispone de todos los servicios necesarios, de hecho no hace falta alejarse más de 10 o 15 minutos en coche para disfrutar de playas, pueblos o rutas preciosas. Para acabar decir que Manuela y Carlos son encantadores, serviciales y prudentes. Imposible pedir más, ojalá podamos volver algún día..